CAPITULO 6

En la mañana del domingo me desperté preocupada

Había tenido mucho sueño la noche anterior, cuando finalmente llegue a la casa, para pensar mucho en lo que había pasado en el bar. Pero evidentemente mi subconsciente estaba masticando mientras dormía. Mis ojos se mantuvieron abiertos, y aunque el cuarto estaba tranquilo y soleado, yo tome aire.

Tenía ese sentimiento de pánico, no me había controlado aun, pero estaba a la vuelta de la esquina, física y mentalmente ¿conoces el sentimiento? Cuando tú piensas que tu corazón empezara a bombear, cuando tu respiración se acelera, y tus palmas de las manos comienzan a sudar.

Sandra Pelt estaba detrás de mí, y no sabía dónde está y lo que estaba planeando.

Víctor lo tenía para Eric y, por extensión para mí.

Estaba segura de que era la rubia que los 4 matones habían perseguido, y no sabía quién los había enviado o que es lo que hubieran hecho si me atrapaban, aunque tenía un mal sentimiento sobre eso

Eric y Pam estaban a las afueras, y estaba segura de que de alguna manera estaba en vuelta en su disputa.

Y tenía una lista de preguntas. Al principio de la lista: ¿como el Sr Cataliades sabía que necesitaría ayuda en ese momento en particular y en ese lugar en particular?

¿Y cómo sabía que tenía que enviar a los investigadores de Little Rock? Por supuesto, si él había sido el abogado de los Pelt el podría haber sabido que ellos enviaron a Lily y Jack Leeds para investigar la desaparición de su hija Debbie. No tendría mucho que informar a los Leeds, y el podría haber sabido que ellos podían defenderse en una pelea.

Dirían los 4 matones a la policía porque ellos habían ido al bar, y ¿quienes los había mandando? Y de dónde sacaron la sangre de vampiro - eso sería información que ayudaría, también.

¿Qué es lo que las cosas que había obtenido del compartimiento secreto me dirían acerca de mi pasado?

Jale la sabana sobre mi cabeza y revise la casa mentalmente

No había nadie más que yo. Tal vez Dermot y Claude se había ido después de sus grandes revelaciones. Ellos parecían que se habían quedado en Monroe. Suspirando, me senté en la cama, dejando que las sabanas se cayeran. No había escondite de mis problemas.

Lo mejor que podía hacer era tratar de priorizar mis crisis y descifrar la información que podía reunir acerca de cada una.

El más importante era el más cercano a mi corazón. Y la solución estaba fácil.

Gentilmente saque el sobre y la bolsa de terciopelo del cajón de la mesa de noche. Además de el contenido practico (una linterna, una vela, y unos cerillos), el cajón tenía los extraños momentos de mi extraña vida. Pero no estaba interesada el día de hoy más que en los 2 nuevos objetos.

Los lleve hasta la cocina y los deje en el mostrador Mientras me alejaba al lavabo para hacer mi café.

Mientras la cafetera se calentaba, casi saco la parte de atrás del sobre. Pero retire la mano. Estaba asustada. En su lugar localice mi libreta de direcciones. Cargue mi celular en la noche, entonces quite cuidadosamente el cable – cualquier retraso servía – y al final, tome un respiro profundo, apreté el teléfono del Sr Cataliades. Sonó 3 veces. “este es Desmond Cataliades” su voz dijo “estoy viajando y no estoy disponible por el momento, pero si tu quieres dejar un mensaje, tal vez te llame de regreso. O no”

Bueno, maldita sea. Le hice una cara al teléfono, pero al  tono obedientemente  grabe un  mensaje y espere que transmitiera mi urgencia que necesitaba hablar con el abogado. Tache al Sr. Cataliades de mi lista mental y pase al segundo método de enfrentar al problema de Sandra Pelt.

Sandra iba a seguirme hasta que una de las dos estuviera muerta. Yo tenía un real, verdadero y personal enemigo. Era difícil creer que cada uno de los miembros de la familia había  resultado tan podrido (especialmente desde que Debbie y Sandra fueron adoptadas), pero todos los Pelts eran envidiosos, de carácter fuerte, y con odio. Las chicas eran futa de un árbol podrido. Creo, necesitaba saber donde estaba Sandra, y sabia de alguien que podría ayudarme.

 “¿Hola?” Amelia dijo

“¿Como está la vida en la Gran Fácil? Pregunte

“¡Sookie! Dios, ¡es bueno oír tu voz! ¡Las cosas están siendo increíbles para mí!”

“¿en serio?

“Bob se apareció en mi puerta la semana pasada” ella dijo.

Después de que la mentora de Amelia, Octavia, había devuelto a Bob a su forma normal, Bob había estado tan enojado con Amelia que se había comportado como un gato irritado. Tan pronto como él se volvió humano, Bob había dejado Bon Temps para localizar a su familia, quien había estado en Nueva Orleans durante Katrina. Evidentemente Bob se había calmado acerca de todo el asunto de la transformación en gato.

“¿encontró a sus parientes?

“Si, los encontró, su tía y tío los que lo criaron. Ellos obtuvieron un departamento en Natchez lo suficientemente grande para los 2, el podía saber que no había forma de que se quedara de invitado por lo que viajo hospedándose con otros miembros del aquelarre, y después el regreso para aquí. El obtuvo un trabajo cortando el cabello en una tienda tres calles de donde yo trabajaba. El entro en la tienda de magia, preguntando por mi”

Los miembros del aquelarre de Amelia dirigían la Tienda de Magia Genuina en la esquina francesa. “estaba sorprendida de verlo. Pero realmente feliz” ella estaba prácticamente ronroneando en el ultimo enunciado, y me imagine que Bob había entrado al cuarto. “el dijo hola, Sookie”

“dile hola de regreso. Escucha, Amelia, odio  interferir en el sueño de amor joven, pero tengo un favor que pedirte”

“dispara”

“necesito encontrar a alguien”

“¿en el directorio?”

“jajá. No es tan simple. Sandra Pelt está fuera de la cárcel y está disparando por mí, literalmente. El bar había sido bombardeado y ayer 4 drogados vinieron por mí, y pienso que Sandra está detrás de las 2 cosas. Digo, ¿Cuántos enemigos puedo tener?

Escuche tomar un largo respiro a Amelia. “no contestes eso” dije  precipitadamente, “entonces, ella fallo dos veces, y tengo miedo de que pronto envíe a alguien a mi casa. Estaré sola, y no terminara bien para mi”

“¿Por qué ella no empezó ahí?

“De pronto me di cuenta que debería de estarme preguntando eso yo misma desde hace unos días. ¿Crees que tus protecciones sigan activas?

“oh…seguro. Eso podría ser” Amelia sonó un poco complacida. Ella estaba muy orgullosa de sus habilidades de bruja, como debería de estarlo, “¿en serio?, dijo, piénsalo. Tú no has estado aquí en… dios, casi 3 meses” Amelia había empacado todo en su auto la primera semana de Marzo.

“Es cierto, pero las reforcé antes de que me fuera”

“funciona aun cuando no estás por ahí” quería estar segura, mi vida dependía de eso.

 “Funcionaran por un tiempo, después de todo estaba fuera de la casa por 4 horas al día y seguían cuidando. Pero si tengo que renovarlas, o se desvanecerán. Tú sabes, tengo 3 días seguidos que no tengo que trabajar. Pienso que puedo ir por allá y revisar la situación.”

“eso sería un gran alivio, aunque odio comprometerte”

“no, no hay problema, tal vez yo y Bob tengamos un viaje en carretera. Les preguntare a otros miembros del aquelarre como es que encuentran a las personas. Nosotros nos podemos encargar de la protección y encontrando a la perra le damos un disparo.”

“¿crees que Bob estará dispuesto a regresar aquí?” Bob había estado bajo un hechizo casi todo el tiempo que estuvo en mi casa bajo la forma felina, por lo que tenía mis dudas.

“Solo puedo preguntarle. Al menos que te llama, voy a ir”

“Muchas Gracias” no me había dado cuenta que mis músculos estaban tan tensos entonces se empezaron a relajar. Amelia dijo que venía.

Me pregunte porque no me sentía a salvo con mis dos hadas alrededor. Ellos eran mis parientes y aunque me sentía feliz y relajada cuando estaban en la casa, confiaba más en Amelia

En el lado practico, nunca sabia cuando estarían Claude y Dermot en la casa. Ellos estaban pasando más y más noches en Monroe.

Tendría que poner a Amelia y a Bob en el cuarto que está pasando el pasillo enfrente del mío, como los dos tipos estaban ocupando los de arriba. La cama en mi antiguo cuarto era corta pero ninguno de los dos Bob y Amelia eran altos.

Todo estaba siendo trabajado en mi mente, me serví una taza de café y levante el sobre y la bolsa.

Me senté en la mesa de la cocina con los objetos en frente de mí. Tenía el terrible impulso de abrir el bote de la basura y arrojarlos sin abrir, el conocimiento en ellos sin aprender.

Pero eso no era algo que tú haces. Tú abres las cosas que se supone deben de ser abiertas.

Abrí la tapa y la punta del sobre.  La novia del vestido con bolados en la foto me estaba viendo mientras deslizaba la carta amarillezca para sacarla. La sentí polvosa de alguna manera, a través de tantos años en el ático se habían metido en los espacios microscópicos en el papel. Suspire  y cerré los ojos, reforzándome. Después abrí el papel y mire la letra de mi abuela.

Estaba inesperadamente en dolor al ver: la punteada y comprimida, pobremente deletreada y puntuada, pero era de ella, de mi abuela. Había leído dios sabe cuántas cosas que ella había escrito en nuestra vida juntas; lista de compras, instrucciones, recetas, también unas cuantas notas personales.

Había un manojo de ellas en el tocador aun.

Sookie, estoy tan orgullosa que te gradúes de la preparatoria. Desearía que tu mama y tu papa hubieran estado aquí para verte en tu toga y birrete.

Sookie, por favor arregla tu cuarto, no puedo aspirar si no puede ver el piso

Sookie, Jason te recogerá después de la práctica de softball, tengo que ir a una reunión del club de jardinería.

Estaba segura de que esta carta sería diferente. Estaba en lo correcto. Ella empezó muy formal.

Querida Sookie

Creo que tú encontraras esto, si nadie más lo hace. No hay ningún otro lugar donde lo puedo dejar, y cuando creo que estarás lista te diré donde la guarde.

Las lágrimas rodaron por mis ojos. Ella había sido asesinada antes de que ella pensara que estaba lista. Tal vez nunca estaría lista.

Tú sabes que yo amaba a tu abuelo más que nada.

Yo pensé que lo sabía. Ellos tenía un matrimonio solido… asumí. La evidencia sugería que tal vez ese no era el caso.

Pero yo quería hijos tanto, tanto. Sentía que si tenía niños mi vida seria perfecta. No me di cuenta que pedirle a Dios por una  vida perfecta esta una estupidez. Estuve tentada más allá de mi habilidad para resistir. Dios me castigo por mi codicia, creo. El era tan hermoso. Pero supe cuando lo vi que no era una persona real. El me lo dijo después que el era en parte humano, pero no vi mucha humanidad en el. Tu abuelo había salido a Baton Rouge por un viaje largo.

Más tarde esa mañana tuvimos una tormenta que tiro un gran pino en la carretera por lo que estaba bloqueada. Estaba tratando de cortar el pino para que tu abuelo pudiera pasar con la camioneta por la carretera. Tome un receso para ir al jardín trasero para ver si la ropa colgada estaba seca, y él salió del bosque. Cuando él me ayudo a mover el árbol – bueno, el lo movió solo – dije gracias, por supuesto. No sé si tu sabes esto, pero decir Gracias a alguien de ellos, tu estas obligada. No sé porque es sol, si esos solo son modales.

Claudine había mencionado eso de paso cuando la conocí por primera vez pero yo creía que ella me había dicho eso porque era una cosa de etiqueta de las hadas. A pesar de mis modales, trate de asegurarme que nunca explícitamente  agradecerle a Niall, incluso cuando intercambiamos regalos en Navidad. (Había tomado cada poquito de control que tenia para no decir “gracias” decía: “oh tu pensaste en mi, se que lo disfrutare.” Y cerraba mis labios. Pero Claude…que había estado mucho alrededor de él, sabía que le había agradecido por sacar la basura o por pasarme la sal. ¡Demonios!

Como sea, le pregunte que si él quería algo de beber y el estaba sediento, y yo estaba tan sola y quería un bebe. Tu abuelo y yo habíamos estado casados por 5 años en ese momento y no había ninguna señal de un bebe en camino. Entonces supuse que algo estaba mal, así que no sabríamos que era hasta que después el doctor le dijo que tenía… bueno, pobre Mitchell. No fue su culpa, era la enfermedad. Solo le dije que había sido un milagro que hubiéramos tenido dos, no necesitábamos los cinco o seis que esperábamos. El nunca me vio raro acerca de eso. El estaba tan seguro que nunca había estado con alguien más. Eran carbones con fuego en mi corazón. Era malo que lo hubiera hecho una vez, pero dos años más tarde Fintan regreso y lo hice otra vez, y esas no fueron las únicas veces. Era tan extraño. Algunas veces yo pensaba que podía olerlo, y volteaba y ahí estaba Mitchell.

Pero tener a tu papa y a Linda valía la pena la culpa. Los amaba tanto, y espero que no fuera mi pecado que los haya hecho morir jóvenes.

Al menos Linda tuvo a Hadley, donde quiera que este, y al menos Corbett los tuviera a ti y a Jason. Verte crecer ha sido una bendición y un privilegio. Los amo a los dos más de lo que puedo decir. Bueno, voy a escribir por mucho tiempo. Te amo, corazón, ahora tengo que decirte acerca del amigo de tu abuelo. El era un hombre de cabello negro, realmente grande, y habla elegantemente.

El dijo que era como una especie de promotor, como una especie de padrino, pero no confiaba en el. El no se veía como un hombre de Dios. El vino después de que Corbett y Linda nacieron. Después de que ustedes dos nacieran, pensé que tal vez el regresaría. Efectivamente, el se presento de repente, una vez mientras cuidaba a Jason, y una vez mientras te cuidaba a ti, cuando ustedes estaban en la cina. El les dio a cada uno un regalo, el dijo, pero no era algo que podías poner en una cuenta bancaria. Lo que pudo resultar útil cuando te viniste a vivir conmigo

Después el vino una vez más, hace unos años. El me dio esta cosa verde. El dijo que las hadas se los dan entre ellas cuando ellas están enamoradas, y Fintan se lo había dado para que me lo trajera si el moría antes de que yo muriera. Tiene un encantamiento en eso, dijo. Nunca tendrás que usarlo, espero, el dijo, pero si lo necesitas recuerda que es solo una vez, no es como una lámpara, como en el cuento, con un montón de deseos.

El llamo a esta cosa un cluviel do, y me enseño como deletrearlo.

Entonces, creo que Fintan está muerto, aunque estaba asustada de preguntarle algo. No he visto a Fintan desde que tu Padre y Linda nacieron. Los sostuvo a los dos y después se fue, el dijo que él no podría regresar mas, que era muy peligroso para mí y para los niños. Que sus enemigos lo seguirían si seguía visitando, incluso si el venia disfrazado. Pienso que él quiso decir que antes había venido disfrazado y eso me preocupaba. ¿Y porque tendría enemigos? Pienso que tal vez las hadas no se llevan bien como las personas. A decir verdad me sentía peor y peor acerca de tu abuelo cada vez que veía a Fintan, entonces cuando él me dijo que se iba definitivamente fue un alivio. Me seguía sintiendo muy culpable, pero cuando recuerdo haber criado a tu papa y Linda estoy tan feliz de haberlos tenido, y de criarlos a ti y a Jason ha sido una alegría.

Como sea. Esta carta es tuya ahora que te voy a dejar esta casa y el cluviel dor. Parecería que no es justo que Jason no reciba nada mágico, pero el amigo de tu abuelo dijo Fintan los había visto, y a ti era la que se lo tenía que dar. Creo que deseo que tú no tengas nunca que saber nada acerca de esto. Siempre me he preguntado si tu problema viene porque eres un poquito hada, pero entonces, ¿porqué a Jason no le pasa lo mismo? O a tu papa o a Linda, a todo esto Tal vez tú no tengas que saber las cosas solo pasan. Deseo que yo pudiera curarlo para que tuvieras una vida normal, pero debemos de tomar lo que nos da Dios, y tú has sido muy fuerte manejándolo.

Por favor se cuidadosa. Espero no estés enojada conmigo, o pienses lo peor de mi. Todos los hijos de Dios somos pecadores. Al menos mis pecados llevaron a una vida para ti, Jason y Hadley.

Adele Hale Stackhouse (abuela)

Había mucho que pensar acerca de eso que no sabía por dónde empezar

Estaba simultáneamente pasmada, sorprendida, curiosa y confundida. Antes de que pudiera detenerme, Levante mi otra reliquia. La bolsa de terciopelo. Solté el lazo, que envolví en mis dedos. Abrí la bolsa y deje que esa cosa dura dentro - la cluvier dor, el regalo de mi hada padrino - cayó en mi palma.

Lo ame instantáneamente

Era verde claro cremoso, terminado en oro, era una de esas cajas en la tienda de antigüedades, pero nada en Splendide había sido tan hermoso. No pude ver un pestillo, una bisagra, nada, no se abrió cuando gentilmente presiona y jale la tapa - y realmente había una tapa en oro. Mmm. la caja redonda no estaba lista para gritar su secreto. Ok. Tal vez tenía que hacer una investigación. Puse el objeto a un lado y me senté con las manos dobladas en la mesa, viendo al espacio. Mi cabeza estaba llena de pensamientos.

Abue había estado obviamente muy emocional cuando escribió la carta. Si nuestro padrino le hubiera dado más información acerca de este regalo, ella a propósito no lo menciono o ella simplemente no había recordado nada más. Me pregunto cuándo se forzó a escribir esta confesión.

Obviamente esta había sido escrita después de que mi tía Linda murió, eso pasó cuando mi abuela estaba en sus 70s. El amigo de mi abuelo - estaba segura de que reconocía la descripción. Seguramente el padrino era el señor Cataliades, el abogado demonio. Sabía que le había costado decir - en papel - que ella había tenido sexo con alguien que no era su esposo. Mi abuela había sido un individuo fuerte, y ella también había sido cristiana devota. Esa admisión la había tenido que acechar

Ella tal vez se había ajustado, pero ahora que estaba recuperada de ver a mi abuela como una mujer, no la juzgue. ¿Quién era yo para avenar piedras? El predicador me había dicho  que todos los pecador eran iguales a los ojos de dios, pero no podía evitar sentir (por ejemplo) que un molestador de menores era peor que una persona quien había engañado en sus impuestos o una persona que había tenido sexo sin sancionar para tener un bebe.  Estaba probablemente equivocada, porque nosotros no se supone que elijamos y escojamos cuales reglas obedecemos, pero esa era la forma en que me sentía.

Metí mis confusos pensamiento en una esquina de mi cabeza y levante el cluviel dor de nuevo. Tocar su suavidad era puro placer, como la felicidad que sentía como cuando abrazaba a mi bisabuelo – pero por 200. La Cluviel dor era aproximadamente como 2 galletas oreos apiladas. La frote contra mi mejilla. ¿Tenias que tener una palabra mágica para abrirla?

 “Abracadabra,” dije “por favor y gracias”

No, no funciono, además me sentí como una idiota “ábrete sésamo” susurre. “presto cambio” no

Pero pensar en lo mágico me dio una idea. Yo le escribí un correo electrónico a Amelia, y era un difícil mensaje para escribir. Sabía que el correo electrónico no es totalmente seguro, pero no crea que alguien consideraba los pocos mensajes de alguna importancia. Escribí “odio preguntar, pero aparte de hacer la investigación del lazo de sangre para mi, ¿puedes averiguar algo sobre una cosa de hadas? ¿Con iniciales c.d? eso era lo más sutil que podía ser.

Después regrese a la admiración por la Cluviel dor. ¿Necesitas ser un hada pura para abrirla? No eso no podría ser el caso. Había sido un regalo para mi abuela, presumiblemente para usar en caso de una necesidad, y ella había sido completamente humana.

Desearía que no hubiera estado tan lejos en el ático cuando ella fue atacada.

Cada vez que recuerdo como ella había estado tirada en el piso de la cocina como despojo, limpiando su sangre, me sentí enferma y furiosa, tal vez si ella hubiera tenido tiempo de buscar la cluviel dor, ella se podría haber salvado.

Y con ese pensamiento, tuve suficiente. Regrese la cluviel dor a su bolsa de terciopelo y regrese la carta de mi abuela al sobre. Mientras estaba tan enojada tanto como podía manejarlo.

Era necesario esconder estas cosas. Desafortunadamente, su previo y excelente escondite había sido enviado a una tienda en Shreveport.

Tal vez, debería de llamar a Sam. El podría poner la carta y la cluviel dor en la caja fuerte de Merlotte. Pero considerando el ataque al bar, no sería el mejor lugar para guardar algo de valor. Podría manejar hasta Shreveport para usar mi llave y entrar en la casa de Eric y encontrar algún lugar ahí. De hecho era muy posible que Eric tuviera una caja fuerte, también, y nunca se tuvo la oportunidad de enseñármela. Después de pensarlo un poco, eso tampoco parecía una buena idea.

Me preguntaba si mi deseo de quedarme con las cosas era simplemente porque no quería estar separada de la cluviel dor.  Me encogí de hombro. No sé como la convicción vino a mi mente, pero estaba segura que la casa era el lugar más seguro, al menos por ahora. Tal vez podría pone la suave caja verde en el agujero para dormir de los vampiros en el closet de la habitación de huéspedes. Pero eso no era más que apenas una caja y ¿qué tal si Eric necesitaba pasar el día ahí?

Después de destrozarme el cerebro, puse el sobre en la caja de papeles sin examinar del ático, esto sería desinteresado para cualquiera excepto para mí.

La cluviel dor era más difícil de esconder, al menos en parte porque me seguía resistiendo al impulso de sacarla de la bolsa de nuevo.

La lucha me hizo sentir muy Gollumnesca

“mi preciosa” murmure. ¿Dermot y Claude serian capaces de sentir la cercanía de este objeto? No por supuesto que no, había estado en el ático todo el tiempo y ellos no lo habían encontrado.

¿Qué tal si vinieron a vivir conmigo con la esperanza de encontrarlo? ¿Qué tal si sabían o sospechaban que tenía esa cosa? O (más probable) ¿Qué tal si ellos se estaban quedando aquí porque a ellos les hacia feliz esa proximidad? Aunque sabía que había agujeros en esa idea, no podía sacudírmela. No era mi sangre de hada que los atraía, era la presencia de la Cluviel dor.

Ahora estaba siendo paranoica, me dije severamente, y me arriesgue a darle una mirada más a la cremosa verde superficie. La cluviel dor, pensé, lucia como una miniatura de un maquillaje en polvo. Con esa idea, el escondite perfecto vino a mí. Tome la Cluviel dor fuera de su bolsa de terciopelo y lo metí en el cajón del maquillaje en mi tocador. Abrí mí polvo y le rocié un poco en el brillo de color verde cremoso. Le añadí un cabello de mi brocha. ¡Ha! Estaba satisfecha con el resultado. Después de todo metí la desintegrada bolsa de terciopelo en el cajón de los cinturones. Mi razón me decía que el andrajoso objeto era solo una vieja bolsa, pero mis emociones me decían que era algo importante porque mi abuela y mi abuelo lo habían tocado.

Tenía tantos pensamientos rebotando en mi cerebro que se apago por el día. Después de que hice un poco de limpieza, mire el softball universitario en ESPN. Amo el Softball, porque lo jugué en la preparatoria.  Ame ver a las jóvenes y fuertes mujeres de toda América. Ame verlas jugar un juego tan difícil como pudieron, arremetiendo, nada en reserva. Me di cuenta mientras estaba viendo que yo conocía a dos mujeres como esa; Sandra Pelt y Jannlynn Hopper. Había una lección ahí, pero no estaba segura de cual era.